sábado, 26 de abril de 2014

Cansancio y agotamiento

Dicen que después de la calma viene la tormenta. Dicen que viceversa.

Casi con dolor de cabeza me animo a escribir esto que sigue. Paso por un momento difícil, pero con la certeza-privilegio de que depende enteramente de mí si las cosas saldrán bien o saldrán mal. En el trabajo pendo de un hilo, pero hay una oportunidad de redimirme. No la voy a dejar pasar. La ventaja es que tomará apenas dos días para que eso sea visible. La desventaja es que mientras tanto hay mucha presión encima.

Mucha presión encima. Veo todo lo que debo hacer en menos de un mes y me abrumo. Tengo una lista de casi cien pendientes. ¿Cuándo encontraré tiempo para hacerlo todo? No lo sé, pero sí sé que me las arreglaré. Sacrificios. Sacrificios vendrán. Casi hacer sólo lo indispensable. Tratar de descansar, de relajarme mientras duermo.

Este domingo saldré a comer con una lindísima pareja de amigas lesbianas (novias) y un amigo suyo. Parece un chico de buenos sentimientos. Creo que podremos ser amigos. Hace unos días otro sujeto se voló la barda y me aseguró que yo quería besarle, que nos besaríamos una y otra vez. Hasta fijó fecha y lugar. Tuve que meter el freno muy rápidamente, y lo hice. ¿Qué pasa con estos defensores de DDHH hoy en día? En este mundo estamos tan necesitadxs de cariño...

La cantidad de pendientes por resolver podría parecer un riesgo para los procesos del cuidado de sí, pero creo que lo mejor será interpretarlo todo de otra manera. Terminar con ellos, salir adelante, será mi ascesis, mi disciplina, mi momentáneo arte de la existencia. Este fin de semana es la despedida de mi vida social. ¿Qué es eso? Casi quisiera un diccionario etimológico para revisar.

Encima este domingo comenzaré con una locura musical que probablemente sea muy provechosa dentro de unos meses. Encima, cierto colectivo maravilloso parece estar por ceder muchas responsabilidades -las principales, digamos- a un nuevo grupo de personitas, grupo en el que figuro yo. Encima, ha de ser muy oportuno hacer un documental sobre el colectivo justo cuando pasa esto; ajá. Encima, encima, encima...

Sea como sea, toca reír un poco de mí mismo. Rodeadws como estamos de tanta muerte y de tanta violencia, toca elegir la vida. La vida que es muy corta como para sufrirla tanto...

Dicen por ahí que parece que hay suelo. Lo dejaremos respirar, con la esperanza de que ahí crezcan flores.

Estaré ahora revoloteando en las cosas más pequeñas, más pequeñas, que me llevan. En los sueños, en los sueños de ti, de mí.

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